El Comité Federal del PSOE dio ayer luz verde a la abstención en el Congreso cuando se celebre la votación de la próxima (aunque todavía no convocada) sesión de investidura. Se han decidido por hacer lo único que podían hacer ya que era esto o elecciones, y no tenían muy seguro salir bien librados de unos nuevos comicios. Estaban entre la espada y la pared, con la peculiaridad de que la espada se la han puesto ellos mismos en el gaznate practicando desde el principio un antipeperismo visceral que en otros momentos y lugares no han observado. Han sido, en definitiva, víctimas del Frankenstein ya con vida propia que ellos mismos habían creado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario